Pequeño
despoblado situado a escasos 12 kilómetros al norte de la ciudad de Huesca. Se
ubica a un kilómetro escaso del pueblo de Apiés, con acceso desde esta
localidad siguiendo una pista de tierra que conduce a diferentes campos y
parcelas.
Aparece
con dos fuegos en 1495. Alcanzó su techo poblacional en el año
1940, con un total de 49 habitantes. Quedó deshabitado a finales de los
años sesenta del pasado siglo XX.
Un
total de cinco viviendas y una iglesia de cronología moderna componían este
pequeño núcleo. Una única calle alineaba todas las viviendas. Edificios de
piedra y tapial, grandes puertas doveladas -hoy expoliadas-, y ventanas con
algunos detalles decorativos populares documentó el profesor Adolfo Castán en
los años 70. Hoy todo es diferente en Lienas; su cercanía con el asfalto ha sido su sentencia de muerte. Lienas ha
sufrido el cruel expolio de los “amigos de lo ajeno” y los años de abandono y
la vegetación han hecho su trabajo. Lienas hoy solo sabe de ruina.
De
entre todas las viviendas destacaba casa Acín. Además de su portada de acceso,
magnífica, sus bajos contaban con una impresionante bodega que, hasta hace unos
pocos años, aún se podía visitar. La bodega guardaba recipientes de piedra y
toneles de grandes dimensiones que, afortunadamente, pudimos fotografiar hace
algunos años.
La
iglesia parroquial se halla unos metros al norte de las viviendas. Estaba
dedicada a San Vicente. Es un templo de nave única y planta rectangular
rematada en cabecera plana. Fue restaurada tras la Guerra Civil, aunque ya
nunca se llegó a utilizar. Para acudir a misa los domingos, durante casi 20
años, los habitantes de Lienas tuvieron que acercarse hasta el cercano
núcleo de Apiés.
Artículo publicado por El Cruzado Aragonés (septiembre de 2019).
Fotografía 1; Lienas desde la pista de Apiés (Cristian Laglera)
Fotografía 2; Llegada al núcleo (Cristian Laglera)
Fotografía 3; Iglesia de San Vicente (Cristian Laglera)
Fotografía 4; Hermosa dovela, ya expoliada (Cristian Laglera)