28/2/10

CLAMOSA










La orilla izquierda del río Cinca, en el sector sur de la comarca de Sobrarbe, embalsada en el pantano de Mediano en este punto, acoge una buena cantidad de pueblos sin censo de los que nos ocuparemos en este y en próximos artículos. Clamosa es uno de estos lugares. Se trata de una localidad deshabitada desde los años 60 perteneciente al municipio de La Fueva. Se documenta el tenente de su castillo en el año 1067 (Velasco Date).

Es un pueblo de claro origen militar. Se sitúa en lo alto de un cerro rocoso y contaba con un castillo del siglo XI del que apenas quedan algunos vestigios. Perviven los arranques de la torre sobre un estrato calizo en la cota más alta del núcleo.

Clamosa fue un pueblo importante. En 1495 contaba con 11 fuegos. En el año 1834 se constituyó en ayuntamiento. Fue en el año 1845 cuando incorporó a Salinas de Trillo, formando entonces término municipal junto con Lapenilla, Trillo y Salinas, a los que hay que sumar las aldeas de Caneto, Bediello y Samper.

Diecisiete casas y más de 150 habitantes tenía Clamosa a comienzos del pasado siglo XX. Actualmente todas ellas, salvando quizá a casa Plana, se encuentran en estado ruinoso. Pasear por su caso urbano no es tarea sencilla, pero,aun así, merece la pena. La última casa que cerró la puerta fue casa El Pon; lo hizo en el año 1969.

Fue un pueblo agrícola y ganadero; trigo, cebada y centeno eran los cultivos predominantes. En cuanto a los animales eran las ovejas y las cabras los más habituales.

Si hablamos de los edificios religiosos de Clamosa tenemos que citar dos iglesias y tres ermitas. Las iglesias están dedicadas a La Asunción y Nuestra Señora de la Esperanza. Las ermitas se consagraron a San Antonio, San Martín y San Vicente.

La iglesia de La Asunción fue construida durante el siglo XVIII y la de Nuestra Señora de la Esperanza en el siglo XI. Arquitectónicamente hablando la más importante es la de la Esperanza. Es un templo de origen románico, de una sola nave y planta rectangular finalizada en ábside de tambor canónicamente orientado. La nave se cubre con bóveda de cañón y la cabecera con bóveda de horno. El campanario de espadaña de doble ojo se eleva sobre el hastial occidental.

Las ermitas de San Antonio y San Martín se ubican a las afueras, en la pista de Caneto. Son edificios de cronología moderna, fechables en los siglos XVII-XVIII. La de San Antonio se halla en ruina y devorada por la maleza. La de San Martín aún mantiene aspecto digno. Por último, más alejada y accesible desde Pano, se sitúa la ermita de San Vicente (s. XVII). Es un edificio de planta rectangular cubierto con bóveda de cañón y cabecera plana más baja y estrecha que la nave.

La fiesta grande se celebraba en honor a la Virgen de la Asunción el día 15 de agosto. Tenía una duración de dos días. Había misa, procesión, ronda y matanza de cordero. También había baile por la noche. La fiesta pequeña se celebraba el 17 de enero, para San Antonio, con misa en la ermita dedicada a este santo.

De Clamosa proviene la leyenda de "las lumbretas de Clamosa". Lumbretas son almas en pena que vagan por la tierra sin poder llegar al purgatorio. Para librarte de ellas hay que lanzarles una buena piedra “foradada”.

Si alguien tiene interés en llegar a Clamosa hay diferentes opciones.Hay pista de tierra desde La Aldea de Puy de Cinca y también desde Caneto. Ambas pistas son restringidas y tienen barreras que podemos encontrar indistintamente abiertas o cerradas. Otra opción es hacerlo a pie siguiendo cualquiera de estas dos pistas o bien por un sendero PR que parte desde el despoblado de Lapenilla. Hacerlo a pie, siempre es la mejor opción.



Artículo publicado en El Cruzado Aragonés (agosto de 2020)  



Fotografía 1; Clamosa (Cristian Laglera)
Fotografía 2; Llegada al despoblado  (Cristian Laglera)
Fotografía 3; Casas Plana y Latorre  (Cristian Laglera)
Fotografía 4; Iglesia de La Asunción (Cristian Laglera)
Fotografía 5; Iglesia de Nª Sª de la Esperanza  (Cristian Laglera)
Fotografía 6; Ermita de San Antonio (Cristian Laglera)
Fotografía 7; Ermita de San Martín (Cristian Laglera)