15/5/11

BERGOSA






Elevado sobre la orilla izquierda del río Aragón se halla el deshabitado lugar de Bergosa. Se sitúa en magnífico emplazamiento, en posición claramente estratégica a unos dos kilómetros en línea recta al sureste de Castiello de Jaca. Magnífico mirador desde el que disfrutaremos de unas privilegiadas vistas de Jaca y la Peña Oroel hacia un lado y del valle de La Garcipollera y Castiello de Jaca hacia el otro.

Para encontrar la primera mención de Bergosa tenemos que retroceder hasta el año 948. Aparece citado en el cartulario de San Juan de la Peña como parte de una donación recibida.

En nuestra última visita, que data del año 2013, encontramos un pueblo en ruina, con la excepción de un par de bordas que algunos antiguos habitantes estaban reconstruyendo. Precisamente una de estas bordas es utilizada por los vecinos y descendientes de Bergosa para celebrar un almuerzo el día de San Saturnino, acto que llevan realizando desde el año 1998.

Durante el pasado sigloBergosa agrupó seis viviendas. Sus nombres eran: Iguácel, Estúa, Palacín, Isidoro y Campo, además de la casa de la Abadía. Aparece con 60 habitantes en el año 1900, que disminuyen hasta los 31 que poseía en 1960. Poco tiempo después, en 1966, el pueblo quedaría desierto.

Todas las casas permanecen en ruina, hundidas y sin cubierta, pero las calles y la fuente se conservan limpias de maleza. Todo es gracias a la colaboración de los antiguos vecinos, que aprovechan la festividad de su patrón para mantener el pueblo en aceptables condiciones. También han rotulado los nombres de las casas en las puertas de acceso, aunque estén en ruina. Se agradece este tipo de detalles cuando vas a un pueblo.

En el centro del núcleo se levanta la iglesia románica de San Saturnino. Originalmente fue un templo de nave única rematado en ábside semicircular orientado al este. Posteriormente sufrió gran cantidad de reformas, las más importantes se efectuaron durante los siglos XVI y XVII.  Fruto de estas reformas son las capillas laterales del lado norte y una segunda nave situada al sur. La torre y al atrio también son elementos posteriores.

La opción más recomendable para llegar a Bergosa es hacerlo a través de un bello camino de herradura que tomaremos desde el puente de Torrijos, en la carretera N-330. Llegaremos a Bergosa tras 45 minutos de subida que ganaremos mediante dos empinados zig-zag. También hay acceso por pista (todoterreno) que parte desde el arranque del valle de La Garcipollera. De ser posible, la mejor opción, siempre a pie.

 

Artículo publicado en El Cruzado Aragonés (noviembre de 2020).



Fotografía 1; Vista aérea (Fernando Rivero)
Fotografía 2; Parroquial de San Saturnino (Cristian Laglera)
Fotografía 3; Cabecera (Cristian Laglera)
Fotografía 4; Borda en ruina  (Cristian Laglera)