Burgasé fue uno de los pueblo mas grandes e importantes del valle de La Solana, sin ir más lejos fue cabeza de distrito durante muchos años. Se encuentra situado en una loma sobre el barranco de San Juste, muy cerca del pueblo de Gere.
En los siglos XVII y XVIII Burgasé llegó a tener mas de 30 casas, aunque varias de ellas estaban ya “amortadas” y fueron utilizadas como pajares u otros edificios auxiliares. En el censo del año 1900 todavía aparecen 24 casas abiertas con 182 habitantes censados.
La iglesia parroquial de La Asunción se sitúa en el centro del núcleo, es una construcción del siglo XVI ampliamente reformada durante el XVIII. Tiene una gigantesca nave dividida en cuatro tramos, cabecera orientada al oeste y tres capillas laterales a cada uno de sus lados, además del coro y una airosa espadaña.
También merece mención un esconjuradero de planta cuadrada que hay junto a la iglesia, al sureste; parece que fue construido en el siglo XVII.
No quiero olvidarme de la ermita de Santa Marina, situada muy cerca de la pista que comunica Burgasé con el vecino lugar de Gere. Es una construcción del siglo XVII, de nave única y cabecera de testero plano.
Burgasé esta ocupado por un pequeño grupo de neorrurales desde hace unos cuantos años. Gracias al trabajo de esta gente el aspecto de Burgasé es muy diferente al que presentaría en caso de estar abandonado. De hecho lo primero que vimos al llegar a Burgasé fueron unos trabajados huertos con sus coloridas frutas y verduras a escasos metros de la iglesia. Aun así, una sensación de tristeza recorre tu cuerpo cuando paseas entre los escombros de sus calles. Y es que cualquier comparación con lo que ese pueblo fue anteriormente no deja de ser bastante triste.
Este fue otro de los pueblos afectados por la construcción del embalse de Jánovas. Sus tierras, al igual que las del resto de pueblos de La Solana, fueron expropiadas para la repoblación de pinos. Como todos sabemos finalmente la obra no se llevó a cabo, pero el resultado fue que más de 150 familias tuvieron que abandonar sus pueblos y tierras forzosamente.
Fotografía 2; Impresionante vivienda (Cristian Laglera)
Fotografía 3; Viviendas (Marina González)
Fotografía 4; Fachada todavía en pie (Cristian Laglera)
Fotografía 5; Iglesia parroquial (Marina González)
Fotografía 6; Interior de la iglesia (Marina González)
Fotografía 7; Esconjuradero (Cristian Laglera)