Pequeño núcleo perteneciente al municipio de Bonansa que encontramos situado a media distancia de las poblaciones de Cirés y Gabarret. Tiene acceso por una estrecha carretera que tiene su inicio en las inmediaciones de Pont de Suert, con desvío un poco antes de llegar a Cirés a nuestra derecha a una pista de tierra que nos conducirá hasta Espollá.
Fue un lugar de dos casas (Barrabés y Perquintana); actualmente están situadas dentro de una propiedad privada y es utilizado como caserío de carácter agropecuario. En el nomenclátor del año 1930 aparece citado con 15 habitantes.
Las dos casas tienen buenas dimensiones, una de ellas todavía está en uso, al menos en momentos puntuales. La prueba son los perros ladradores que intervienen sin nos aproximamos a ellas. Por precaución y respeto a esos perros tomé imágenes de las viviendas desde la lejanía.
Al margen de las dos viviendas, lo más interesante son las ruinas de su iglesia románica, dedicada a San Miguel. A pesar de los escasos restos que han llegado hasta nuestros días algunos expertos la fechan en el último tercio del siglo XI. Lo que hoy encontramos en pie es una buena parte del muro sur y un fragmento del ábside semicircular del mismo lado. Como su localización no es sencilla, pues son pocos los vestigios y están devorados por la maleza, adjunto una vista aérea por si alguno pretende visitarla.
Es extraño que un templo de grandes dimensiones como fue éste guardara alguna relación con una pequeña aldea de dos casas como fue Espollá; quizá fue la iglesia parroquial de algún despoblado medieval de mayor tamaño ya desaparecido.
Fotografía 1; Vista aérea (Cristian Laglera)
Fotografía 2; Viviendas (Cristian Laglera)
Fotografía 3; Iglesia de San Miguel (Cristian Laglera)