6/7/16

PARDINA DE URUÉN






Esta semana vamos a conocer otra de las muchas pardinas que salpican la geografía de la comarca de La Jacetania, concretamente, hablaremos de la pardina de Uruén.
Se sitúa entre Anzánigo y Bernués, a unos dos kilómetros de la carretera A-1205 que sube en dirección a Jaca.

Repasando los censos y nomenclátores del pasado siglo XX vemos que sólo aparece citado en el año 1930, censando seis habitantes. Por aquel entonces pertenecía al municipio de Rasal.
Una vez llegados a la pardina, llaman la atención las grandes dimensiones de la vivienda principal. La puerta de acceso abre a sur; allí tiene labrada una fecha con clave del año 1914. La totalidad de la cubierta se halla derruida en el suelo; da mucha lástima ver un edificio de este empaque en este estado tan deplorable.

A su alrededor, se sitúan los correspondientes edificios de apoyo: un corral, una pequeña borda, un pajar, un gallinero...

Otra cosa que merece ser destacada es la tapa de piedra de un antiguo sepulcro, que yo no pude localizar, pero que gracias a mi amigo Sergio Larraga puedo documentar con esta fotografía (nº4).
Rastreando los alrededores, en todo lo alto de un cerro situado a escasos metros del caserío, encontré los vestigios de un edificio de planta rectangular orientado al este. Los restos apenas levantan unos 15 centímetros del suelo. ¿Quizá una pequeña capilla? Los restos son tan escasos como poco esclarecedores.

En cualquier caso estamos ante un lugar muy digno de ser visitado, y, a pesar de su lamentable estado, la Pardina de Uruén, se resiste a caer en el olvido refugiándose en la memoria.


Fotografía 1; Pardina Uruén  (Cristian Laglera)
Fotografía 2; Llegada a la pardina  (Cristian Laglera)
Fotografía 3; Vivienda  (Cristian Laglera)
Fotografía 4; Tapa de antiguo sepulcro  (Sergio Larraga)