El reportaje de esta semana tiene como protagonista una interesante pardina situada dentro de los límites de la comarca de La Jacetania; su nombre es la Pardina de Sasal. Permanece despoblada desde mediados de los años sesenta del pasado siglo XX, momento en que Domingo y Teresa (sus últimos moradores) abandonaron el núcleo.
Sus tierras son bañadas al oeste por el río Estarrún y al norte por el barranco de La Corona.
Una vez en la pardina vemos que el perímetro de la vivienda se encuentra acotado por una alambrada, dado su mal estado y el riesgo de derrumbe. A pesar de su estado vemos que es un edificio espectacular; tenía de tres plantas y se cubría con tejado de losa a dos aguas. En su parte superior está rematado por un vano circular. Mención aparte merece (merecía) su magnífica chimenea tronco-piramidal, hundida desde el año 2014. Adjunto una fotografía del año 2011 de mi amigo Miguel Barrutia.
El núcleo lo completan otras dos edificaciones situadas a escasos metros de la vivienda que también se encuentran arruinadas, edificios claramente construidos con fines agrícolas y ganaderos.
La pardina de Sasal se localiza aproximadamente a medio camino de las poblaciones de Fraginal Bajo y Lastiesas Bajas. Llegaremos por medio de una pista de tierra que tomaremos unos metros antes de cruzar el puente sobre el río Estarrún, a la altura del kilómetro 13.
Fotografía 1; Vivienda (Miguel Barrutia)
Fotografía 2; Puerta de acceso (Miguel Barrutia)
Fotografía 3; Chimenea antes de caer (Miguel Barrutia)